Al leer esto, algunos se estarán llevando las manos a la cabeza, tal vez incluso me estén insultando, y entre los insultos el más suave tal vez sea "insensato". ¿Y a qué viene esto?
Hay ocasiones en que debemos hacer determinadas operaciones de mantenimiento en nuestro ordenador para las cuales es necesario actuar con los permisos del llamado usuario root. Este "superusuario" tiene privilegios para alterar cualquier cosa en nuestro Mac, incluso en el mismo corazón del sistema operativo.
En las raras ocasiones en que se necesite recurrir a él, podemos hacerlo "invocándolo" desde líneas de comandos en el Terminal, por ejemplo para eliminar archivos o carpetas que no se dejan borrar, procedimiento que ya vimos en un post anterior y que es el procedimiento más seguro y recomendable, y que prefieren los usuarios más "geek".
¿Quién es ese "otro"?
¿Y no sería mucho más cómodo iniciar una sesión en el entorno gráfico, tal como hacemos habitualmente con nuestro usuario habitual, con nuestros archivos, carpetas y ventanas? Además, el uso de Terminal echa atrás a la mayoría de usuarios, y el uso de términos como "invocar", "kill" y demás extraños conjuros pueden parecer sospechosos. Una vez leí que alguien que se dedicó a leer líneas de comandos en sentido inverso se llevó un sorpresa…
Pero el uso del usuario root en el entorno gráfico viene desactivado por defecto y no es por capricho. Si éste está habilitado, el Mac resulta muchísimo más vulnerable desde el punto de vista de la seguridad y debemos ser plenamente conscientes de ello. Si no se tiene cuidado podemos causar daños graves en el sistema operativo. Por tanto, solo debiéramos utilizar este recurso de forma excepcional.
Admito que, decir por un lado que debemos saber muy bien lo que hacemos, para a continuación explicar los pasos a seguir puede ser contradictorio e incluso incongruente. Es como esos programas de televisión en los que insertan el rótulo "nunca hagáis esto en casa" mientras muestran de forma detallada y en horario infantil como hacer experimentos peligrosos.
Pero es que la cosa es así de incongruente: "aquellos que si saben muy bien lo que hacen", lo pueden hacer del modo más seguro porque saben utilizar Terminal, y los usuarios "menos avanzados" que ni siquiera saben lo que es aquel deben recurrir al modo sencillo …pero mucho más peligroso.
Por ello, son habituales en los foros las frases del tipo "no veo motivo para activar el usuario root", para a continuación explicar toda una serie de líneas de comandos para hacer tal y cual cosa desde Terminal. Lo normal es que a continuación otros participantes sugieran comandos diferentes o diferentes variantes, iniciándose una discusión muy amena, pero que al usuario "doméstico" le hace sentir como un ignorante. Al menos ya tenemos un motivo: "quiero hacer cosas sin necesidad de usar Terminal".
En Leopard podíamos acceder a la "Utilidad de Directorios" que teníamos en la carpeta Utilidades, pero en Snow Leopard ha cambiado de ubicación, y la encontraremos en: /System/Library/CoreServices.
Deberemos desbloquear la aplicación haciendo clic en el icono del candado, tras lo cual se nos pedirá nuestra contraseña habitual como usuario administrador que somos.
Ahora, en Edición" seleccionaremos "Activar usuario root", y nuevamente, en "Edición" iremos a "Cambiar contraseña de usuario root", donde introduciremos un password para éste.
Por último, debemos volver a bloquear la aplicación haciendo nuevamente clic en el icono del candado. He llegado a leer, que explicar cómo activar el usuario root "es como darle una pistola a un mono". Pero como veis, yo os tengo en mejor consideración.
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