martes, 22 de diciembre de 2009

¿Compartir carpetas entre ordenadores a través de internet?


Compartir carpetas entre ordenadores de una misma red es muy sencillo, sin embargo es habitual plantearse hacer lo mismo entre ordenadores situados en oficinas o domicilios distantes y "a través de internet".  Esto es perfectamente posible, pero nada sencillo para un usuario "de a pie". Si alguien se lo pregunta, este es uno de los motivos por los que proliferan los servicios tipo "mobile me", "Live Mesh", Ubuntu One", o mi favorito DropBox, que nos permiten disponer de "un sitio" donde guardar archivos que queremos que sean accesibles por nosotros mismos desde otro lugar, o que queremos compartir con otros, y que nos evitan complicaciones como las que siguen.


¿PORQUÉ NO ES "TAN FÁCIL?"

A modo de introducción rápida en el tema, lo primero es ver de qué modo se comparte esa carpeta; siendo lo más lógico usar el protocolo FTP. FTP es tan antiguo como internet, y se sigue utilizando por su eficiencia incluso si se dispone de una conexión a la red lenta. Si se dispone de un Mac se puede utilizar el servicio FTP ya integrado en Mac OS X, o bien añadir algún software que permita un mayor control sobre lo que se hace, como el gratuito PureFTP para Mac o el también gratuito Filezilla Server para Windows o Linux.

Este software convierte al ordenador en "servidor FTP", y permite compartir determinadas carpetas con otros ordenadores que accedan a ellas utilizando otro software llamado "cliente FTP". Filezilla (cliente) y CuteFTP para Windows, o Cyberduck y Transmit para Mac, son algunos ejemplos. Que quede claro que en ningún caso vamos a cometer la imprudencia de compartir todo el disco duro de nuestro ordenador, sino unas determinadas carpetas en las que guardaremos solo ciertos archivos.

Acceder al "servidor FTP" desde otros ordenadores será fácil: teclearíamos en nuestro "cliente FTP" la IP del servidor, así como un "nombre de usuario" o "login" y el correspondiente "password" o contraseña.
Por defecto FTP utiliza el puerto 21 y no hay que especificarlo (ftp://192.168.1.5:21), pero si instalamos, por ejemplo,  PureFTP éste suele utilizar el 2121 para no entrar en conflicto con el servicio del propio Mac. En este caso accederíamos también al Mac escribiendo: ftp://192.168.1.5:2121

Vale, pero ¿qué es un puerto? Haciendo un símil poco técnico, en el mando de nuestro televisor podemos seleccionar distintas botones o numeraciones para acceder a diferentes canales a través de un mismo cable de antena. Para no hacernos un lío solemos asignar ciertas numeraciones a determinados canales. En España, por ejemplo, el botón número "1" solemos hacer que corresponda a TV1, el "2" a TV2, el "3" a Antena3, el "5" a Tele5, etc... aunque no tiene porqué ser así y pueden ser otros, es sólo una convención.

Los ordenadores tienen "puertos", y existe también una convención para que por defecto se utilicen ciertos puertos para cada tipo de tráfico de datos, aunque todo entre y salga por un mismo cable. La navegación web se suele hacer a través del puerto 80, el acceso via FTP por el 21, la descarga de correo POP por el 110, y para jugar online al "Age of Empires" el 2301 y sucesivos, etc....

Todo esto de los puertos no tiene demasiada importancia en una red local, pero es fundamental cuando se accede "desde internet" a un ordenador "de tu casa u oficina".



Todos los ordenadores de tu casa: la Xbox, la impresora de red y el router tienen una dirección IP única y distinta. Esta se puede introducir manualmente o bien se confía en que el router asigne una a cada uno mediante el servicio DHCP.
Pero "desde fuera", desde internet, lo único visible sería la IP pública o externa de tu router. Tu router tiene "desde dentro" (desde tu red local o LAN) otra IP, que para los ordenadores es la puerta de enlace o "gateway", que suele ser 192.168.0.1 ó 192.168.1.1

El asunto es, que cuando alguien teclea tu IP ṕublica (la única visible desde el mundo exterior) y quiere acceder mediante FTP, el router debe saber a qué ordenador en concreto debe dirigir ese tráfico. Esto se llama "mapear puertos" o "port mapping" y consiste en crear en el router unas tablas en las que se asocian determinados puertos con ciertas IPs. El cómo se hace esto depende de la marca y modelo de router, pero podemos encontrar ayuda y manuales en muchas páginas de internet.

Otro tema es que tu dirección IP pública no tiene porqué ser siempre la misma, a menos que lo hayas solicitado expresamente y "pasando por caja". El proveedor de servicios puede asignarte automáticamente una IP pública diferente cada vez que apagues y enciendas el router. En principio habría que preguntar a los "del otro domicilio" qué dirección IP pública tienen en ese momento antes de acceder a esa carpeta compartida.

Esto se soluciona mediante un servicio gratuito llamado DynDNS. Si te llamas Fulano y te das de alta en el servicio obtendrás una dirección tipo: fulano.dyndns.ws Deberás instalar un software en tu Mac que periódicamente envía la IP pública del router a los servidores de DynDNS.

De este modo, cuando alguien escriba en su cliente FTP la dirección: ftp://fulano.dyndns.ws:2121, se redirigirá a la IP pública de tu router, éste verá que la petición se hace la puerto 2121 y llevará el tráfico al ordenador que tiene el "servidor FTP" instalado.


LA ALTERNATIVA: "ALMACENAMIENTO ONLINE"

Como todo esto puede ser muy complicado, existen servicios -muchos gratuitos- que facilitan las cosas a los usuarios. Si necesitas "esa carpeta para compartir datos", te la facilitan ubicada en un servidor. Si se dispone de una cuenta en "Mobile me", "Live Mesh" o Ubuntu One" te ofrecen una especie de "disco duro virtual" donde hacer tus copias de seguridad o guardar archivos. Google Apps, por ejemplo, además de crear y editar documentos "online" te permite compartirlos con otros usuarios, y recientemente también te deja compartir carpetas, aunque sólo permite utilizar archivos de tipo "ofimático".
Otros sitios ofrecen FTP gratuito, como Tripod, Files-Upload o DriveHQ, aunque ojo, en muchos casos los archivos que subamos sólo permanecen cierto tiempo (unos meses):



Pero el que desde mi punto de vista resulta el más práctico y cómodo es DropBox, que ofrece de forma gratuita hasta 2GB de espacio en disco. Podemos descargar un software que nos muestra el espacio en disco del servidor como un "disco local" en nuestro ordenador, a modo de "memoria USB virtual". Podemos instalar el software en todos los ordenadores que utilicemos, ya funcionen con Mac OS X, Windows o Linux (existen versiones para todos). Es muy fácil compartir las carpetas y datos con otros usuarios e incluso "copiar el URL" de un documento y enviarlo por email a otra persona para que descargue el archivo haciendo clic en el enlace. Es más, por defecto trae habilitada una función de sincronización entre los contenidos del "espacio online" y la correspondiente carpeta local.


OTRAS OPCIONES.

Y volviendo a lo de "interconectar" dos ordenadores para compartir archivos, cabe la posibilidad de hacerlo a través de programas de mensajería, pero requieren que haya alguien pendiente "al otro lado".

Existe otra opción, que como en el caso anterior, el truco está en utilizar un "intermediario". LogMeIn y NTRConnect son cada uno de ellos, una combinación de "servicio" prestado por los desarrolladores respectivos y un software "cliente" que se instala en nuestro ordenador. Si utilizamos las" versiones gratuitas" podemos controlar un ordenador remoto; es decir ver la pantalla del otro ordenador, ya sea PC o Mac, e interactuar con teclado y ratón como si estuviéramos sentados frente a ellos. Pero si pagamos una cuota, además "de ver el otro ordenador" podemos hacer más cosas, como transferir archivos entre unos y otros

El software de los ordenadores (pueden ser más de dos) se conecta con los servidores de LogMeIn ó NTRConnect, que hacen de intermediarios y permiten gestionar las conexiones. Para ello basta darse de alta en el servicio e instalar una pequeña aplicación en el Mac o PC. En su momento hice una guía o tutorial para instalar y utilizar NTRconnect, en Macuarium y en una entrada de este mismo blog.


miércoles, 2 de diciembre de 2009

En defensa de los derechos de los ciudadanos en internet

No puedo menos que adherirme al Manifiesto en defensa de los derechos de los ciudadanos en internet de WeblogsSL y Xataka. Me ha puesto sobre la pista Reynaldo .

1.- Los derechos de autor no pueden situarse por encima de los derechos fundamentales de los ciudadanos, como el derecho a la privacidad, a la seguridad, a la presunción de inocencia, a la tutela judicial efectiva y a la libertad de expresión.

2.- La suspensión de derechos fundamentales es y debe seguir siendo competencia exclusiva del poder judicial. Ni un cierre sin sentencia. Este anteproyecto, en contra de lo establecido en el artículo 20.5 de la Constitución, pone en manos de un órgano no judicial – un organismo dependiente del ministerio de Cultura -, la potestad de impedir a los ciudadanos españoles el acceso a cualquier página web.

3.- La nueva legislación creará inseguridad jurídica en todo el sector tecnológico español, perjudicando uno de los pocos campos de desarrollo y futuro de nuestra economía, entorpeciendo la creación de empresas, introduciendo trabas a la libre competencia y ralentizando su proyección internacional.

4.- La nueva legislación propuesta amenaza a los nuevos creadores y entorpece la creación cultural. Con Internet y los sucesivos avances tecnológicos se ha democratizado extraordinariamente la creación y emisión de contenidos de todo tipo, que ya no provienen prevalentemente de las industrias culturales tradicionales, sino de multitud de fuentes diferentes.

5.- Los autores, como todos los trabajadores, tienen derecho a vivir de su trabajo con nuevas ideas creativas, modelos de negocio y actividades asociadas a sus creaciones. Intentar sostener con cambios legislativos a una industria obsoleta que no sabe adaptarse a este nuevo entorno no es ni justo ni realista. Si su modelo de negocio se basaba en el control de las copias de las obras y en Internet no es posible sin vulnerar derechos fundamentales, deberían buscar otro modelo.

6.- Consideramos que las industrias culturales necesitan para sobrevivir alternativas modernas, eficaces, creíbles y asequibles y que se adecuen a los nuevos usos sociales, en lugar de limitaciones tan desproporcionadas como ineficaces para el fin que dicen perseguir.

7.- Internet debe funcionar de forma libre y sin interferencias políticas auspiciadas por sectores que pretenden perpetuar obsoletos modelos de negocio e imposibilitar que el saber humano siga siendo libre.

8.- Exigimos que el Gobierno garantice por ley la neutralidad de la Red en España, ante cualquier presión que pueda producirse, como marco para el desarrollo de una economía sostenible y realista de cara al futuro.

9.- Proponemos una verdadera reforma del derecho de propiedad intelectual orientada a su fin: devolver a la sociedad el conocimiento, promover el dominio público y limitar los abusos de las entidades gestoras.

10.- En democracia las leyes y sus modificaciones deben aprobarse tras el oportuno debate público y habiendo consultado previamente a todas las partes implicadas. No es de recibo que se realicen cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales en una ley no orgánica y que versa sobre otra materia.

domingo, 29 de noviembre de 2009

Boot Camp vs VMware o Parallels


Boot Camp y el uso de “máquinas virtuales” son dos formas diferentes de utilizar Windows en nuestro Mac. Esto supone la gran ventaja de poder utilizar los dos sistemas operativos en una misma máquina. Como alguien decía: “lo mejor de dos mundos”.

Boot Camp es un método mediante el cual, y con la ayuda de una utilidad incluida en Mac OS X llamada "Asistente Boot Camp", podemos crear una segunda partición en el disco duro del ordenador (“dividirlo en dos”), e instalar Windows en ésta tal como haríamos al instalarlo en un PC.

Necesitaremos para ello de un disco de instalación de Windows (con su correspondiente licencia), preferiblemente Windows XP, aunque también podemos utilizar Windows Vista o Windows 7. Para que Windows, una vez instalado reconozca todos los componentes del ordenador Apple serán necesarios los correspondientes drivers. Estos vienen incluidos en el disco original de instalación de Mac OS X del ordenador.

Podemos particionar (dividir) el disco en dos partes iguales -una para Mac OS X y otra para Windows- o destinar un espacio mayor a un sistema operativo o a otro, según el uso que vayamos a hacer de éstos. Para utilizar un sistema u otro es necesario reiniciar el ordenador, lo cual es una de las diferencias más importantes con el uso de "máquinas virtuales". Podemos "arrancar como Mac" o hacerlo "como un PC" …de marca Apple.

¿Qué ventajas tiene Boot Camp respecto a la virtualización mediante VMware o Parallels?

- Boot Camp viene incluido con Mac OS X, no hay costes añadidos.
- Iniciando el ordenador con Windows, utilizaremos el ordenador con este sistema operativo al 100% de su rendimiento.

¿Y los inconvenientes?

- Podemos utilizar sólo un sistema operativo simultáneamente. Para cambiar de entorno, recordemos, hay que reiniciar cada vez el Mac.
- Un Mac funcionando con Windows sufre todos los inconvenientes y vulnerabilidades que sufriría un PC convencional. Y se entiende que el comprador de un Mac lo es por considerar esos factores lo suficientemente importantes.

La virtualización mediante Parallels, VMware Fusion o Virtualbox consiste en instalar un software en Mac OS X que actúa en cierta forma, como si de un PC físico o real se tratara. Esta "máquina virtual" puede funcionar sobre uno o varios "discos duros virtuales". El Windows instalado "está convencido" de que tanto "el PC" como "los discos" son completamente reales; sin embargo, para Mac OS X son software y archivos, y puede tratarlos como eso.

VMware Fusion y Parallels son dignos competidores y es difícil recomendar uno en concreto. Virtualbox queda por detrás, aunque tiene la ventaja de ser gratuito. Es muy importante el hecho de que tanto Mac OS X como el Windows de la máquina virtual pueden compartir carpetas o directorios. Para el Mac serán las carpetas que realmente son, en Windows, sin embargo aparecerán como "discos de red".

¿Qué ventajas tienen VMware o Parallels respecto a Bootcamp?

- Es posible utilizar Mac OS X y Windows simultáneamente, sin reiniciar. No sólo compartirán archivos y carpetas, sino que podremos incluso copiar y pegar entre las aplicaciones de un entorno u otro. Por ejemplo, buscar, editar y copiar imágenes en "la parte Mac" y pegarlas en un Powerpoint de "la parte Windows". O utilizar Internet Explorer o aplicaciones sólo existentes para Windows y sin salir de Mac OS X.

- Todo el entorno Windows virtualizado está compuesto de archivos y carpetas que pueden ser copiadas y restauradas fácilmente.
Esto quiere decir que podemos crear una copia de pocos GB de todo el Windows instalado, actualizado y registrado, con todas las aplicaciones utilidades y configuraciones ya establecidas. Si tenemos la precaución de guardar nuestros archivos en "el entorno Mac", en el momento en que surja cualquier problema con la instalación de Windows sólo será necesario reemplazar la máquina virtual por su copia, y en pocos minutos tendremos todo funcionando de nuevo.


- Podemos crear más de una máquina virtual, ya sea con diferentes versiones de Windows (3.1, 95, 98, 2000, XP, Vista, Seven) o distintas distribuciones de Linux. Es más, si la memoria RAM y el procesador del Mac lo permiten, se pueden ejecutar varias a la vez.

¿Cuáles son los inconvenientes de la virtualización?

El principal es que el rendimiento de una máquina virtual es inferior al del Mac iniciado con Windows. Si bien Microsoft Office, Explorer y la mayoría de aplicaciones y utilidades funcionan perfectamente -y en algunos casos mejor que en un PC real- ciertas aplicaciones muy exigentes con la tarjeta gráfica y el cálculo 3D o que exigen mucho del procesador, pueden funcionar lentamente o no llegar a arrancar, como ocurre con muchos juegos recientes.

Por otro lado, al coste de la licencia de Windows hay que sumar el de Parallels (69,99€) o Vmware Fusion (61,95€), que sin ser excesivo puede "echar para atrás" a algunos, aunque personalmente considero que está más que justificado.

Sin embargo ambos permiten hacer algo interesante: “importar” toda una instalación de Windows ya existente en un PC real (incluidos aplicaciones, documentos y todo el disco duro) y crear un disco virtual utilizable dentro del Mac.

Y finalmente, algo a tener muy en cuenta: no es incompatible usar la virtualización y Boot Camp en un mismo ordenador. Incluso existe la posibilidad de hacer que las máquinas virtuales utilicen, no alguno de los discos duros virtuales, sino el Windows de la partición hecha con Boot Camp. Es decir, que tanto si arrancamos "como ordenador PC" como si iniciamos una máquina virtual utilizamos la misma instalación de Windows, los mismos programas y archivos.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Ubuntu o "el ordenador electrodoméstico"


Una afirmación malintencionada dice que Linux es el sistema operativo del futuro... y que siempre lo será. Esto, en mi opinión no es del todo cierto. Linux en realidad ya está aquí, como eficaz, estable y seguro sistema operativo de servidores o máquinas especializadas. Pero su uso y características suelen estar lejos de lo que espera un "usuario normal". Entre la gran variedad de distribuciones ("versiones") Linux, que para sus defensores es una prueba de su potencial y versatilidad, pero que para el "usuario de a pié" sólo es motivo de confusión, Ubuntu es la que destaca desde hace un par de años como "la más cercana" y "la más fácil" para un usuario más habituado a Windows o a Mac OS X.

Es muy fácil de instalar, sencillo de utilizar y permite añadir aplicaciones y utilidades de modo increíblemente sencillo. O sea, que para los gurús de Linux es simplón, limitado y poco configurable. Pero como alternativa a otros sistemas operativos es el único utilizable por un usuario normal "no iniciado" y que no desea aprender a escribir extraños conjuros en el Terminal.

¿Utilizaría yo Ubuntu como sistema operativo único? No, ya que difícilmente podría sincronizar mi móvil, utilizar fácilmente un sintonizador TDT o grabar algo de la televisión. Tampoco tendría fácil utilizar cualquier módem 3G USB o conectar cualquier escáner o webcam. ¿Acaso todo esto es imposible? No si me apasiona pasar horas buscando, compilando paquetes y tecleando comandos. Pero para un uso "doméstico" típico, Ubuntu ya viene con todo lo necesario preinstalado.

Y si necesito algo más, el "Centro de Software de Ubuntu" es una utilidad incluida en éste que permite instalar con un par de clics, gran cantidad de utilidades y aplicaciones eligiéndolas de un listado organizado por categorías que se actualiza automáticamente conectándose a diferentes servidores de software para Ubuntu.


No todo aparece en estos listados, pero es cada vez más frecuente encontrar para su descarga, paquetes de instalación tipo .deb (propios de la distribución Linux Debian, de la que deriva Ubuntu). Estos funcionan como los autoejecutables .exe de Windows o los .pkg de Mac OS X, y no requieren del uso de comandos de ningún tipo. Que Ubuntu llegue a un número mayor de usuarios "no avanzados" dependerá sin duda de que cada vez existan más aplicaciones o utilidades con instaladores "deb".

Sin embargo, instalado en un "segundo ordenador", por ejemplo un portátil ya viejo para defenderse con Windows 2000 o XP, es ideal para navegar, para el correo, para escribir, escuchar música, ver fotos o películas, etc... Se mueve fluidamente allí donde Windows empieza a arrastrase lastimosamente. Así, en muchos casos Ubuntu está condenado a funcionar sobre máquinas viejas, inútiles ya con las últimas -y voraces de prestaciones- versiones de Windows. Pero esto no es algo deshonroso; Ubuntu está pensado para funcionar en lugares donde los usuarios no se pueden permitir el lujo de "estar a la última", y convierte en una máquina útil cualquier PC de segunda o tercera mano.

Ubuntu es perfecto también para tu madre o para tu suegra como alternativa a Windows. Es sencillo, estable, y resistente a sobrinos y nietos que intentarán infructuosamente instalarle todo tipo de ".exes", ya que juegos como el Mahyjongg, Klondike o Sudoku no suelen ser de su agrado. Dejarán de llamarte constantemente con problemas y sustos varios. Un ordenador con Ubuntu es lo que yo llamo "ordenador electrodoméstico". Es decir, lo enciendo, navego, mando un par de correos, miro un par de fotos y lo apago. Es algo parecido a lo que se pretende con esos pequeños y baratos "netbooks" con alguna versión de Linux preinstalada.

Sin embargo, yo no guardaría todas mis fotos, películas y documentos en el disco duro en el que he instalado Ubuntu, sino en un disco externo USB, o en pendrives. Si "algo va mal" (por un problema de hardware, por ejemplo) puedo reinstalar todo en menos de una hora, pero con mis datos a salvo.

Podemos descargar gratuitamente Ubuntu directamente desde su web oficial y grabarlo en un CD para su instalación. Puede sorprender, por contraste con otros, la sugerencia de que hagamos copias y las distribuyamos libremente entre los amigos y conocidos.

La instalación es facilísima, sin necesidad de conocimientos previos ni de teclear ni una sola línea de comandos. He probado Ubuntu en un par de docenas de ordenadores de sobremesa y portátiles, y en casi todos los casos no ha tenido problemas en reconocer y hacer funcionar, así por las buenas, tarjetas de video, sonido, red, WIFI, USB, etc... De hecho, en las últimas pruebas, el instalador de Ubuntu ha reconocido todos los chipsets de sonido, red y video, cosa que no hacían -en los mismos ordenadores- ni XP ni el nuevo Windows 7 Home Premium. En el Tablet PC de Acer que estoy utilizando para escribir ésto, reconoce incluso la pantalla "táctil" y permite utilizar el lápiz o stylus para dibujar sobre ésta o mover el puntero para interactuar con iconos y ventanas.
Sin embargo, si ha sido más complicado con ciertos periféricos como dispositivos USB Bluetooth, webcams o scanners.

Olvídate de instalar y actualizar antivirus. Es prácticamente inmune a virus y demás "malware", y al menos a medio plazo, podemos prescindir tranquilamente de toda la parafernalia de utilidades de protección que son una de las causas de ralentización y graves problemas de Windows. Tampoco nos veremos asaltados por constantes advertencias y avisos de seguridad.

Para uso ofimático, Ubuntu ofrece un paquete similar al ubicuo Microsoft Office. Writer, el procesador de textos de OpenOffice, reemplaza perfectamente a Word, y no como un sustituto de segunda división pero gratuito, sino por derecho propio. Calc, la hoja de cálculo de OpenOffice, tiene poco que envidiar a Excel. Es en realidad tan potente como éste, y para la mayoría de usuarios es mucho más que suficiente, aunque los usuarios "avanzados" de Excel pueden verse algo perdidos ante una aplicación diferente a ese Excel que dominan con los ojos cerrados. Superar a Powerpoint debiera ser fácil, y no entiendo como éste se ha convertido en un "standard" en el mundo de las presentaciones, siendo una aplicación con una interfaz tan mal hecha, con opciones tan caóticas y dispersas. Sin llegar a la excelencia del Keynote de Apple, se podría haber hecho otra cosa, pero el Presenter, o software de presentaciones de OpenOffice si que es una simple imitación de Powerpoint.

Como Linux que es, Ubuntu permite correr Wine, una capa de software que nos deja instalar y ejecutar algunas aplicaciones de Windows ...sin instalar Windows. Lo interesante para muchos, es que entre estas aplicaciones están algunas de Office, como Word, Excel, Powerpoint o Access, aunque no funcionan correctamente todas las versiones de cada aplicación. En la página de Wine podemos ver listados y "tablas de compatibilidad".


En gráficos, Gimp no tiene nada que envidiar a su majestad Adobe Photoshop, excepto en un punto fundamental en el mundo profesional de las artes gráficas: trabajar con CMYK o cuatricomía, imprescindible en preimpresión y que aún no está implementado, excepto mediante ciertos parches.

Evolution, no está mal, pero si que me parece una imitación de Microsoft Outlook. Integra correo, calendario, contactos y tareas, cosa que no hace Thunderbird, que sin embargo considero uno de los mejores clientes de correo en cualquier plataforma.
No forma parte de Ubuntu, pero puede ser instalado con dos clics desde la utilidad "Centro de Software de Ubuntu".

Y hablando de calendarios y contactos, nos encontramos con uno de los mayores problemas de Ubuntu y otros Linux. Sincronizar citas y direcciones con nuestro teléfono, Blackberry, Pocket PC o iPhone es prácticamente un imposible. Que lo sea con el iPhone de Apple o dispositivos con Windows Mobile de Microsoft tiene una explicación clara, pero lamentablemente tampoco es algo que podamos hacer con otro tipo de "smartphones". Si existe soporte para las antiguas Palm, ya prácticamente en desuso.

El magnífico VLC Media Player sustituye y supera tanto a Windows Media Player de Windows como al Quicktime Player de Mac OS X. Tampoco viene con Ubuntu, pero también puede ser instalado desde el Centro de Software de éste.

Songbird hará olvidar iTunes a muchos usuarios. Es una aplicación aún joven, pero de interfaz muy bien terminada. Está disponible para su descarga como instalador ".deb".

Si dispones de un PC poco utilizado, prueba Ubuntu. No tienes nada que perder.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Sistemas operativos como Matrioskas


Este es un "screenshot" o "captura de pantalla" de mi Mac Mini. Sobre el sistema operativo Snow Leopard instalado en éste, podemos ver a la derecha Windows 7 corriendo sobre VMware Fusion; a la izquierda, Mac OS 9 funcionando sobre SheepShaver; y dentro de Mac OS 9 y sobre el antiguo SoftWindows, corre Windows 3.1 .
Al modo de las Matrioskas (esas muñecas rusas que guardan otras en su interior) varios sistemas operativos de diferentes épocas y plataformas en el mismo Mac.
Gracias a "Jabba", por ponerme sobre la pista de SheepShaver (en Faq Mac) en el magnífico foro "Puromac".

martes, 27 de octubre de 2009

Cuando es XP el que no puede acceder a un Mac

En un post anterior mostraba cómo hacer que un ordenador con Windows Vista pudiera acceder a un Mac, ya que en Vista ha cambiado la forma de "autenticación". Pero he observado que en circunstancias que no he podido concretar, a Windows XP le pasa lo mismo.

Y digo esto porque en una red con docenas de PCs con Windows XP, de repente y sin saber aún porqué, uno de ellos deja de poder acceder a las carpetas compartidas por un servidor Mac. Mismo sistema operativo, mismos "Service Packs", configuración idéntica, y sin embargo y posiblemente a partir de cierta actualización, aparece el problema.

La solución es la misma que en el caso de Vista: modificar las Directivas de Seguridad Local, cambiando el nivel de autenticación de LAN Manager.

En Windows XP Pro es muy fácil:
tan sólo deberemos ir a: Paneles de Control > Herramientas Administrativas > Directiva de Seguridad Local > Configuración de Seguridad > Directivas Locales > Opciones de Seguridad > Seguridad de redes: nivel de autenticación de LAN Manager. Una vez en éste cambiaremos el parámetro: "Enviar respuestas de LM y NTLM" por el de "Enviar Lan Manager y NT Lan Manager: usar las seguridad de sesión NT Lan Manager versión 2 si se negocia".


En Windows XP Home es un pelín mas complicado,
ya que hay que "tocar" el registro de Windows. Para ello debemos:

Ir a Inicio > Ejecutar… y en el campo "Abrir" escribir "regedit".
Navegaremos hasta: HKEY_LOCAL_MACHINE\SYSTEM\CurrentControlSet\Control\Lsa
En LSA, buscaremos el valor: REG_DWORD: LmCompatibilityLevel
…y si éste no existe, hay que crearlo.
A continuación cambiar el valor "0", que viene por defecto, por un "1".

WIFI en un Powermac G4


Recientemente, y como he comentado en un "post" anterior, he devuelto a la vida a mi viejo Powermac G4, para utilizarlo como "equipo multimedia", es decir para albergar mi biblioteca de iTunes y para ver películas y televisión (gracias a EyeTV).
Sin embargo, existía un problema: su nueva ubicación está demasiado lejos del router, y resulta complicado llevar hasta ella un cable Ethernet por motivos estéticos. Por otro lado los Powermac G4 no disponen de tarjeta WIFI integrada.
Debía buscar una solución para poder acceder a internet desde ese Mac. La solución PLC dadas las características de la instalación eléctrica de mi domicilio tampoco resolvía el problema: la señal es de mala calidad y muy poco estable. He buscado por tanto, alguna tarjeta PCI o adaptador USB WIFI.

Según tengo entendido existen tarjetas PCI WIFI que son reconocidas por el Mac como las ARIA (G54-PCI) de Sonnet. Sin embargo a este fabricante ya las tiene descatalogadas. Sé también, que existen varios adaptadores USB más o menos compatibles con Mac OS X. Pero una de las premisas era invertir económicamente lo mínimo o aprovechar el "material" ya disponible.

Decidí probar a utilizar un adaptador USB WIFI de D-Link, concretamente el modelo D-Link DWL-G122 que había adquirido hace tiempo para utilizarlo -con éxito- en un viejísimo portátil al que había instalado Ubuntu.
Sin embargo, en la web del fabricante no figura ningún driver para Mac OS X. Recordé que buscando información en internet sobre los adaptadores USB para Linux descubrí que la muchos de ellos utilizan en realidad "chipsets" del fabricante Ralink. Acudí. por tanto a la web de éste y efectivamente, existían para su descarga varios paquetes instaladores para diferentes chipsets y cada uno de ellos con versiones para Mac OS X 10.3 Panther, 10.4 Tiger y 10.5 Leopard.
Con el método de prueba y error he dado con el instalador correcto, que tiene el larguísimo nombre de "RTUSB D71w-1.2.4.0_D2500-1.1.3.0 UI-1.6.8.0_2008_12_04.dmg"

Podéis ver la tabla de dispositivos wireless 802.1g de diferentes marcas, basados en los chipsets de Ralink aquí.

Finalizada la instalación y tras reiniciar veo que efectivamente, aparece un nuevo puerto de red, que no es reconocido como un "Airport" sino como una Ethernet o "en1". Podemos dejar esta conexión en modo "automático" mediante DHCP o introducir manualmente los datos (IP del Mac y del router, máscara, servidores DNS…)



Veremos que instalador ha metido en la carpeta Aplicaciones un utilidad para configurar la nueva red inalámbrica, que es "muy poco Apple" y con muchas más opciones de las que realmente vamos a necesitar.

De hecho, basta crear un nuevo "Profile" y pulsar el botón "Activate".

Tras seleccionar nuestra WIFi entre el listado de las que son visibles, elegir el modo WEP (en mi caso) e introducir el password, veo que la conexión es correcta, tanto en velocidad como en estabilidad.



jueves, 8 de octubre de 2009

Nueva vida para un -por fin silencioso- Powermac G4 "Mirror Drive"

Habitualmente reivindico que se dé una segunda oportunidad a viejos ordenadores Mac que aún son funcionales para determinados usos.
Una gama de modelos muy interesante son los últimos G4 de sobremesa tipo "torre", concretamente los llamados "mirror drive" que son fácilmente reconocibles por tener las tapas frontales de las unidades ópticas con un acabado de "espejo".
Existen modelos con distintos procesadores, doble procesador a 833 GHz, a 1.25GHz, procesador simple a 1GHZ, a 1,2 GHz, etc.… Todos son capaces de correr con muy buen rendimiento Mac OSX Tiger (Leopard "les viene grande"), que sigue siendo un sistema operativo moderno, pero tienen un defecto que puede llegar a ser molesto: el ruido que originan los ventiladores de la fuente de alimentación y el ventilador ubicado entre las dobles bahías de los discos duros. Llegó a hacerse popular el apodo de "Wind Tunnel" (túnel de viento). Cuando aparecieron, y ante las muchas protestas, Apple admitió dentro de la garantía el reemplazo de las ruidosas fuentes de alimentación, pero en la actualidad -y como es lógico- ya no se puede esperar esta solución. Sin embargo, para un usuario no demasiado manitas es posible reemplazar tanto los ventiladores de la fuente de alimentación como el gran ventilador central.

Podemos acudir con los ventiladores a la tienda de componentes informáticos más cercana, o buscarlos de marcas como Arctic (http://www.arctic-cooling.com/catalog/index.php). En mi caso, la pareja costó unos 6€. Es posible que los conectores de los nuevos ventiladores sean diferentes, En ese caso hay que hacer un poco de "bricolage" con tijeras y cinta aislante, y cortar y unir los cables para utilizar los nuevos ventiladores con los conectores antiguos. Los más "manitas" pueden echar mano de soldador y estaño.

Ya sé que es muy poco ortodoxo, pero en mi viejo G4 decidí añadir un ventilador extra, colocándolo en el hueco que hubiese ocupado un segundo disco duro en la bahía o carcasa vertical. Lo hice al darme cuenta de que el nuevo ventilador central no soplaba con la fuerza que parecía conveniente, por lo que pensé que el disipador de calor del procesador podría necesitar de alguna ventilación extra. De hecho, según la utilidad iStat Pro, la CPU se calienta ahota incluso menos que antes.
El viejo G4 a 1.25GHz es ahora lo bastante silencioso como para utilizarlo para ver películas, escuchar música y -gracias a a un sintonizador EyeTV de El Gato- ver televisión.


Breve descripción del proceso.



Para acceder a la fuente de alimentación (B) y cambiar los ventiladores, debemos "despejar un poco el terreno". Retiraremos las bahías o carcasas de los discos duros (1 y 2) tirando de las palancas de plástico situadas en los laterales, así como la de las unidades ópticas (3). Si hemos retirado ésta, el ventilador (A) sale muy fácilmente deslizando hacia arriba.



Para retirar la carcasa de las unidades ópticas es necesario quitar los tornillos (1 y 2) utilizando un destornillador "de estrella".




La fuente, sin embargo precisa de dos herramientas: una llave "torch" para el tornillo que la sujeta a la trasera del ordenador (podría servir yambién algún número de una llave "Allen"), y un destornillador "de estrella" para el tornillo que la sujeta al interior del lateral derecho.

Si bien es posible retirar completamente la fuente de alimentación, para lo cual habría que desconectar todo el cableado, es suficiente ladearla y dejarla apoyada suavemente sobre el disipador de calor del procesador.


Una vez retiremos los tornillos que cierran la tapa de la fuente podremos desatornillar y acceder a los dos ventiladores situados en la parte frontal.


Los cables de los dos ventiladores están conectados a sus correspondientes conectores, que vemos en el lateral de la caja de la fuente (en realidad es la parte inferior antes de ladearla). Para retirar los conectores puede ser necesario recurrir a un cutter o aguja que nos permita soltar las pestañas que los sujetan.


Una vez efectuado el cambio de los ventiladores, seguiremos el proceso inverso para montar todo de nuevo.

sábado, 3 de octubre de 2009

Usar máquina virtual de VMware Fusion en un PC con Windows

Hay algo que yo ya suponía que se podia hacer con Vmware pero que no habia probado hasta ahora, y que creo que es más que interesante: mover una "maquina virtual" desde la biblioteca de Maquinas Virtuales de Vmware Fusion del Mac hasta un PC con Windows (y Vmware instalado) ....y abrirla, así sin más. Aunque sólo sea por poder utilizar el backup de nuestro "Windows virtual" en un PC si a nuestro Mac le pasa algo, ya lo veo muy útil.

Ignoro si esto es así de fácil con Virtualbox o Parallels, o si funcionará igual en una máquina Linux.
En mi caso, por ejemplo, tengo corriendo dentro de un iMac hasta cuatro "servidores virtuales Windows", todos con Windows 2000 o Windows 2000 Server, y que antes se ejecutaban por separado en sus correspondientes viejos PCs y que importé a Vmware "enteritos" (con Vmware Converter).

Aunque ya había probado a usar las "máquinas virtuales" en otros Mac me tranquiliza que pueda usarlas también -en caso de problemas- en un PC con XP, por ejemplo, y sin tener que volver a configurar nada.

martes, 15 de septiembre de 2009

¿Hackintosh o Mac de segunda mano?


Para muchos usuarios es sencillamente imposible adquirir un ordenador Macintosh debido a su precio. Y no se trata de que éste este justificado o no, cosa que es tema para otro debate. Un ordenador es la suma del hardware y del sistema operativo y es este último lo que caracteriza y hace atractivo a un Mac para muchos, hasta el punto de renunciar al hardware de Apple para intentar montar un "hackintosh", que viene a ser el resultado de instalar Mac OS X en un PC en el cual se ha buscado la mayor compatibilidad posible con este sistema operativo.

Esto, como es de suponer no está en absoluto soportado por Apple, de hecho es necesario recurrir a determinados trucos y parches que engañen al sistema operativo haciéndole creer que funciona dentro de un Mac. Para ello existen dos métodos: parchear el ordenador y trastear durante la instalación de forma que sea posible utilizar un DVD instalador original de Apple, o bien "descargar" una imagen ya modificada o "hackeada" de ese DVD que entre otras cosas viene con los drivers para un amplia variedad de hardware. Todo esto no es siempre sencillo y el resultado solo a veces es el esperado.

Conseguir hacer funcionar al 100% un hackintosh requiere paciencia, ciertos conocimientos y puede llevar muchas horas o días, y conseguir que sea estable y siga funcionando a pesar de las sucesivas actualizaciones de software puede ser una constante y ardua tarea. Todo ello es un reto irresistible para muchos manitas, muchos curiosamente ya poseedores de un Mac.

Montar uno mismo un hackintosh puede llegar a ser en muchos países la única solución debido a la brutal diferencia de precio respecto a su valor en Estados Unidos o Europa, o a que no existen distribuidores Apple. Aunque esto afecta a veces igualmente al producto de segunda mano, esta opción no debiera ser descartada. Y no se trata de adquirir un producto con un precio algo inferior al nuevo, sino de apostar por un equipo ya antiguo pero capaz de funcionar con el sistema operativo más reciente posible.

Solo los últimos modelos con procesadores Intel son capaces de correr el nuevo sistema operativo Snow Leopard. En el otro extremo, los viejos Mac con procesadores anteriores a PowerPC G3 sólo son capaces de funcionar con Mac OS 9 y son hoy descartables para un uso general.


Pero sin embargo, hay una gama de equipos con procesador G3 que son utilizables con Mac OS X Tiger (10.4). Los G4 obtienen de este sistema un buen rendimiento, y a partir de velocidades iguales o superiores a 833 GHZ, funcionan incluso con Mac OS X Leopard (10.5). Este corre muy decentemente con procesadores G5, aunque es recomendable ampliarlos como mínimo a 1GB de RAM. Naturalmente no podemos dedicarlos a la edición profesional de video, y es posible que no puedan utilizar las últimas versiones de algunas aplicaciones o utilidades, incluso habrá que renunciar a utilizar aquellas (de momento pocas) que solo funcionan en las nuevas máquinas con procesadores Intel.


¿Y qué se puede hacer con un ordenador así? Pues lo mismo que se hacía con ellos cuando eran novedad: Utilizar Microsoft Office (2004), NeoOffice o iWorks, editar vídeos caseros con el iMovie (iMovieHD 6) de iLife, ver o ripear DVDs, navegar con Safari o Firefox, retocar fotos con Photoshop (hasta CS3 sin problemas), realizar ciertos proyectos de diseño gráfico, etc., etc.… Pero todo esto sabiendo que la integración entre sistema operativo y hardware es total. La llamada "experiencia Mac" será mayor que en un hackintosh, aunque éste tenga mayor "potencia bruta".

Se puede argumentar que un ordenador de segunda mano tiene una vida limitada, pero igualmente limitada es la vida de un hackintosh, ya que nada garantiza que sea compatible con versiones futuras de Mac OS X.

Además con un Mac podremos hacer ciertas cosas problemáticas o difíciles en un hackintosh, como clonar fácilmente el disco de arranque en una unidad externa con Superduper o Carbon Copy Cloner, y determinar este disco como disco de arranque o elegirlo al arrancar pulsando "ALT".

Y sobre todo, poder actualizar el sistema operativo automáticamente sin tener que cruzar los dedos y sabiendo que normalmente todo irá bien, y que será posible utilizar herramientas de reparación como Applejack o Disk Warrior en caso de problemas.

domingo, 30 de agosto de 2009

De huevos, hueveras y bytes.


En uno de los foros en los que tengo el gusto de participar (Puromac), surgía hace poco una pregunta que yo mismo me hice hace ya muchos años:
¿Porqué una imagen JPEG que guardo con un tamaño de 6 Kb y subo a un blog, web o foro, me es mostrada ahí con un tamaño de 8KB? Es decir, ¿porqué un determinado archivo parece ocupar diferente espacio dependiendo del lugar donde la guarde? El mismo documento parece tener diferentes tamaños si lo guardo en un viejo disquete, en un "llavero" USB, un disco duro externo o en mi ordenador.

La explicación es muy sencilla: existe algo llamado "tamaño de unidad de asignación" o "cluster" de un disco duro. Cuando un disco duro es formateado, es dividido en un número de fracciones, celdas, o espacios iguales en los que se guarda la información. Normalmente los medios de almacenamiento de poca capacidad "trocean" el espacio disponible en unidades más pequeñas que los los discos de gran tamaño.

Hagamos el siguiente símil: supongamos que disponemos de una alacena o despensa (nuestro disco duro) en la que queremos almacenar una gran cantidad de huevos (bytes de información). Deberemos elegir hacerlo en "hueveras" o esos envases de cartón que disponen de huecos para colocar huevos de seis en seis, de docena en docena, o de dos docenas en dos docenas (éstas serán los "clústers"). Supongamos que elegimos utilizarlas de una capacidad de una docena. Si guardamos trece huevos necesitaremos dos hueveras, pero ocuparemos el espacio de veinticuatro. Si contamos nuestras existencias en base al número de hueveras utilizadas parecerá que disponemos de veinticuatro huevos.
Si hubiésemos "formateado" nuestra alacena utilizando hueveras de media docena, aparentemente habría dieciocho huevos, pero en realidad siempre hay trece huevos.

Esta inevitable pérdida de espacio se debe a la necesidad que tienen los sistemas operativos (Windows, Mac, Linux) de organizar e "inventariar" los datos almacenados de forma ordenada y de tal modo que sean accesibles.

jueves, 11 de junio de 2009

No confundamos RAM con capacidad de disco duro

Es habitual que se confunda "memoria" (RAM del ordenador) con "capacidad" del disco duro:
"Mi ordenador se está quedando sin memoria y ya no me caben mas fotos".

Voy a intentar realizar un símil: imaginemos un pequeño despacho en el que tenemos solamente una mesa y un armario archivador en el que guardamos no sólo nuestros documentos sino una serie de utensilios como un bloc de notas, un calendario, lápices y bolígrafos, grapadora, clips, la foto de la familia, etc... 
Cuando comenzamos nuestra jornada abrimos el armario, sacamos los utensilios que necesitamos dejándolos sobre la mesa, y sacamos también las carpetas con los documentos sobre los que vamos a trabajar. Distribuiremos sobre la superficie de la mesa la documentación de modo que tengamos todo al alcance y podamos trabajar de la forma más cómoda y rápida.
Si la mesa es grande, podremos sacar del armario una gran cantidad de carpetas y documentos, pero si la mesa es pequeña, nos veremos obligados a ir guardando cosas en el archivador para poder colocar otras, en un constante ir y venir, levantarse y sentarse, que nos hará menos eficientes y más lentos.
Cuando terminamos nuestro trabajo guardamos todo de nuevo en el armario dejando la mesa libre, ya que llega la señora de la limpieza con la balleta y abre las ventanas, pudiendo volar todo...

En este ejemplo, el "armario" sería el disco duro, donde quedan guardados los documentos incluso cuando no estamos trabajando. La superficie de la mesa es la memoria RAM, un espacio de trabajo donde el ordenador copia, al abrirlos, tanto documentos como aplicaciones (las herramientas o utensilios). Si el ordenador tiene poca memoria RAM, deberá estar constantemente copiando y guardando cosas en y desde el disco duro (el armario) resultando todo el proceso lentísimo. Por el contrario, un ordenador con sobrada memoria RAM podrá utilizar diferentes aplicaciones y abrir muchos trabajos simultáneamente, siendo por tanto mucho más eficaz (y "potente"). Tengamos en cuenta que la memoria RAM, al contrario que el disco duro, es volátil y se borra al apagar el ordenador.

Del mismo modo que es interesante disponer de un armario bien amplio, y si no es así podemos sustituirlo por otro mayor o adquirir un segundo armario, si no tenemos un disco duro con la suficiente capacidad de almacenamiento podemos cambiarlo o añadir un segundo disco duro, ya sea interno o externo.
Pero igualmente importante es disponer de suficiente memoria RAM: si la mesa es pequeña habrá que sustituirla por otra de superficie más amplia o colocar otra a su lado.

NOTA: he evitado intencionadamente utilizar la palabra "escritorio" para referirme a la superficie de la mesa con el fin de evitar confusiones. El llamado "escritorio" del ordenador sería en nuestro ejemplo una carpeta más de las que entran y salen del armario.

martes, 9 de junio de 2009

¿Existen discos "para Mac" y "discos para PC"?

No, estrictamente, no existen "discos para Mac" o "discos para PC". Voy a intentar aclarar el tema de forma que lo pueda entender ...hasta tu cuñado.

DISCOS DUROS Y CAJAS EXTERNAS
En primer lugar hemos de distinguir entre "discos duros" como los que hay dentro de nuestro ordenador, y las cajas llamadas "discos externos", en el interior de las cuales, a su vez, hay uno o más discos duros parecidos a los primeros.
Existen dos tamaños habituales: los "grandes" (3.5 pulgadas), que se instalan en el interior de ordenadores "tipo torre" y en cajas externas del tamaño de un libro o aún más grandes (y que suelen requerir de una fuente de alimentación adicional) y los "pequeños" (2.5 pulgadas), que los fabricantes instalan dentro de portátiles y que son los que se suelen encontrar en las cajas externas pequeñas tipo "pocket" o "de bolsillo" (y que no suelen necesitar de fuente de alimentación).
Caja externa ("disco externo") y dos discos duros de 3.5'' y 2.5''

CAJAS EXTERNAS
Estas cajas externas, llamadas habitualmente "discos externos", se conectan al ordenador mediante cables y conexiones que pueden ser USB (lo más frecuente), mediante cables y conexiones "Firewire" (IE1394), y por último y de forma menos habitual, mediante cables y conexiones SATA. El sistema USB es el más universal y económico. Firewire es más caro, veloz, eficiente ... y delicado, y aprovecharán su rendimiento aquellos que trabajan con video, por ejemplo. Los SATA aún no son frecuentes, se utilizan sobre todo en discos de muchos "terabytes" de capacidad.
En algunos modelos de cajas podemos encontrar no sólo una, sino dos o mas tipos de conexiones diferentes (USB, Firewire, eSATA...) Para terminar de liar la cosa, tanto en el caso de USB como en FIrewire existen diferentes tipos de cables y conexiones: USB "normales", USB "minIs", Firewire 400 grandes y pequeños, Firewire 800, etc...
Evidentemente, nuestro ordenador deberá disponer a su vez del tipo de conexión que use el disco.


FORMATO

En realidad, es el "formato" dado a los discos lo que los hace más o menos compatibles con unos y otros sistemas operativos.
Podemos compararlo con esas libretas que adquirimos en papelerías. Podemos comprarlas con las hojas en blanco ("sin formatear") y dibujar en ellas pautas, pentagramas o cuadrículas, o bien comprarlas ya con éstas impresas. Del mismo modo que nosotros podríamos -si estuvieran a lápiz, claro- borrar las cuadrículas y dibujar a continuación las líneas pautadas que necesitáramos, nuestro ordenador puede "formatear" un disco duro como más nos interese. Por supuesto, al hacer esto eliminamos completamente cualquier dato que hubiera en el disco.
Volviendo a los discos en sí: ¿qué formatos son los más habituales?

TIPOS DE FORMATO
Discos con formato FAT32:
Los pueden leer y escribir ("grabar en ellos") tanto Macs como PCs (con Windows y con Linux). El inconveniente de FAT32 es que no permite guardar archivos de más de 4GB (cosa habitual en archivos de video) y hay una gran tendencia a la fragmentación. Además, Windows no puede utilizar el sistema de permisos, y los Mac encuentran algunas limitaciones para usar nombres de archivo de cierta longitud y con ciertos caracteres.
Los "Pendrive" o "llaveros USB", los antiguos disquetes y las PDA suelen estar formateados como FAT32.

Discos con formato NTFS:
Es el formato más adecuado para instalar Windows XP y superior. Los pueden leer tanto Macs como PCs (Windows XP), pero sólo pueden escribir los Windows. Sin embargo existen soluciones (utilidades) como "NTFS for MacOSX" y otras, que permiten que el Mac también pueda escribir en ese formato, a pesar de los esfuerzos de MIcrosoft en poner las cosas difíciles manteniendo en secreto el "código".
En ese formato no se puede instalar sistemas operativos "Windows" inferiores al XP ni tampoco Mac OS X.

Discos con formato HFS+:
Es el formato propio de Apple. Los pueden leer y escribir solo los Macs, siendo inaccesibles para los Windows y Linux. Sin embargo existen soluciones (utilidades) como "MacDrive" que permiten que un PC también pueda leer escribir en ese formato (y funciona bien).
Por supuesto, tampoco se puede instalar ninguna versión de Windows en este formato.

Existen más formatos, claro, como los "ext2" y "ext3" usados por ordenadores UNIX y Linux y que sólo pueden leer y escribir éstos, o los formatos ISO 9660 y UDF, utilizados habitualmente en CDs y DVDs respectivamente, pero que son legibles prácticamente por cualquier ordenador.

FORMATEANDO
Visto lo visto, ya sea desde un PC con Windows, un PC con Linux, o un Mac, es posible formatear un disco duro (interno o externo) en el formato que nos interese. Y es a esto, a lo que realmente se refieren los que hablan de discos "para Mac" o "discos para PC".

jueves, 4 de junio de 2009

¿A qué se llama "hacer un ping"?

Hacer "ping" es enviar una señal a través de una red (ya se por wireless, red interna o internet) con la intención de obtener un "eco" o respuesta automática desde otra máquina, ya sea un router, un ordenador, una impresora, etc... Su finalidad es comprobar que la red entre los dos puntos funciona y que las dos máquinas son capaces de comunicarse entre ellas. Más de uno me ha sugerido que el término puede venir del Ping-Pong, con su" ir y venir". Sin embargo es más aceptado que viene del "Ping" o "Bip" del sonar de los submarinos.

Por ejemplo: creo tener todo bien configurado en el ordenador, y sin embargo no consigo navegar por internet. Puedo hacer un ping al router para ver si hay comunicación entre éste y mi ordenador, ya que podría haber problemas con el cableado, la WIFI o estar mal la configuración de red.

Otro caso: estoy intentando acceder a otro ordenador y me es imposible. Haciendo ping puedo saber si al menos está encendido, el cable de red está enchufado y hay posibilidad de comunicación.

Es habitual hacer ping en éstos casos y muchos otros: a impresoras de red, servidores FTP, servidores DNS, etc... Además, si obtengo respuesta también puedo ver el tiempo en que se produce ésta y hacer diagnósticos del estado y velocidad de la conexión. También puedo hacer ping a diferentes "puertos" (esto será motivo de otra entrada de este blog) para ver cuáles están abiertos. Todo esto es muy conocido por muchos aficionados a los juegos "online".

Por supuesto, he de conocer la dirección IP o nombre de la máquina en cuestión, a menos que decida hacer un "barrido", buscando IP por IP. Para hacer todo esto existen utilidades relativamente fáciles de utilizar y además gratuitas, pero hacer un simple ping es algo muy sencillo ya sea desde un Mac, o un PC con Windows o con Linux.

En Windows es suficiente abrir la Consola del Sistema . Para ello iremos a Inicio/Ejecutar, escribiremos cmd y pulsaremos Enter. En la consola escribiremos "ping" (sin comillas), dejaremos un espacio, y a continuación escribiremos la dirección IP o nombre de dominio de la máquina a la que queremos hacer el ping. A continuación pulsaremos de nuevo Enter.

Cuatro "Pings" realizados a la IP 192.168.10.1, y las respuestas o ecos obtenidos.

En este caso no ha habido respuesta, y nos aparece el mensaje correspondiente.

En el Mac podemos usar el Terminal, pero para muchos usuarios será más sencillo recurrir a la "Utilidad de Red", dentro de la carpeta Utilidades, a su vez dentro de Aplicaciones.

"Pings" realizados desde la "Utilidad de Red del Mac a la IP 192.168.10.1, y las respuestas o ecos obtenidos.

Host is down; no se ha obtenido respuesta a los "Pings" realizados.

Ubuntu y otras distribuciones Linux también disponen de una "Utilidad de Red" parecida a la del Mac.>

"Pings" realizados desde la "Utilidad de Red de Ubuntu 9.0.4, muy similar a la de Mac OS X.