Cuando Apple decidió abandonar los procesadores tipo PowerPC de IBM y desarrollar nuevos modelos con procesadores y arquitectura Intel esto supuso un cambio muy importante desde el punto de vista técnico, pero se quiso hacer de la forma más transparente posible para el usuario de Mac. Se hizo necesario que tanto Apple con su sistema operativo, como los desarrolladores de software lanzaran versiones "universales binarias" capaces de funcionar con ambas arquitecturas.
Pero a partir de Snow Leopard, Mac OS X dejó de ser compatible con ordenadores con el anterior procesador PowerPC, y muchos fabricantes no han querido seguir haciendo el sobreesfuerzo de escribir dos versiones de un mismo producto o de crear esas versiones binarias.
Ello supone que los usuarios de Macs con procesador G5 o modelos anteriores deben conformarse como mucho con Leopard (Mac OS X 10.5) y ven cómo quedan también fuera de su alcance las nuevas versiones de aplicaciones y utilidades que ya sólo funcionan con Intel.
Aún sabiendo ésto ¿vale la pena todavía adquirir un viejo Mac de segunda mano sin procesador Intel?
La respuesta depende, claro está, de lo que se quiera hacer con él.
Supongamos que disponemos de un iMac G5 con Leopard instalado. Para navegar podremos utilizar las últimas versiones de Safari y de Camino (2.0.7), pero sólo podremos instalar Firefox hasta la versión 3.6.17 (Firefox 4 sólo está disponible para Intel), Opera hasta la 10.6.3 (Opera 11 es sólo Intel), y deberemos renunciar por completo a Chrome, que nunca dispuso de versiones para PPC.
Como clientes de correo electrónico, evidentemente disponemos de Mail, pero Thunderbird para PPC se queda en la versión 3.1. No podremos instalar Outlook 2011 y habría que quedarse con el anterior Entourage.
Las suites ofimáticas LibreOffice / OpenOffice todavía son binarias. NeoOffice sin embargo, nos impide instalar una version superior a la 3.1.2 (ya ha salido la 3.2). Apple nos hace conformarnos con iWork 09, y Microsoft con el Office para Mac 2008.
Los diseñadores y fotógrafos deben limitarse a usar la suite de Adobe CS4, CS5 es ya solo Intel; y tampoco pueden recurrir a Pixelmator. La última versión de iLife compatible con nuestro Mac será la 08; la de VLC Player, la 1.1.9; y de la utilidad de grabación Toast, la 10 (la actual es la 11).
Pero a pesar de todo ello, recordemos que el primer Mac con Intel apareció en enero del 2006, y Leopard hace poco más de tres años (26 oct 2008), por lo que podremos hacer todo aquello que se podía hacer con un Mac hace 3 ó 4 años. O podemos plantearlo así; podemos hacer lo que siguen haciendo con él los que aún no han decidido cambiar de equipo. Si bien, a un profesional del video ya no se le pasaría por la cabeza, algunos profesionales de artes gráficas aún siguen utilizando ordenadores PowerPC. Y si bien hay usuarios domésticos a los que les gusta "estar siempre a la última", otros siguen editando los videos de su camara DV con iMovie 06 y aún no lamentan el no poder actualizar a una versión superior a Office 2008.
Como resumen, si alguien a quien no conozco bien me hace la pregunta, le recomendaría sin dudarlo uno de los últimos Mac con procesadores Core i5, i6 ó i7. Recordemos que por el contrario esos viejos equipos están fuera de garantía y puede ser complicado encontrar componentes de recambio. Sin embargo, si el precio es interesante y si no pretendemos disfrutarlo más de uno o dos años, para ciertos usos aún puede resultar productivo un viejo Mac PowerPC: como servidor de correo, archivos, FTP o FAX, como equipo multimedia conectado al televisor, como editor de texto, audio, videos caseros, y -todavía- para navegar por internet.
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